Dermatitis | Recomendaciones de protección de manos

Las manos desempeñan variedad de funciones: tocar, agarrar, sentir,… Por ello una correcta protección de manos es clave para relacionarnos con nuestro entorno, sobre todo en tiempos de Covid-19. Descubre en este post qué alteraciones pueden sufrir, su tratamiento y cómo cuidarlas.

Dermatitis alérgica de contacto

Tanto en las manos como en la piel frágil en general, la dermatitis alérgica de contacto puede ser debida a:

• Exposición continua a emolientes durante un período prolongado y uso de EPIS.
• Pacientes que presentan a menudo un defecto de la barrera cutánea.
• Mayor riesgo de sensibilización por contacto con los componentes de los emolientes y con el material presente en los EPIS (guantes).

Tratamiento

Los tratamientos para la protección de manos distinguen entre formas leves y graves de dermatitis.

La educación emoliente es la base de nuestra pirámide, debe ser importante en cada fase del tratamiento desde las formas más leves hasta las graves.

En formas más graves es necesaria una terapia tópica antiinflamatoria y si no responde, una terapia sistémica.

Terapia basada en la etiopatogenia

La piel frágil requiere cremas que reparen la barrera. La educación sobre el cuidado de la piel supone el 80% de la cura en la dermatitis atópica.

Si existe inflamación, el tratamiento antiinflamatorio tópico consiste en corticoesteroides o los inhididores de la calcineurina.

Educación en la protección de manos

Educar al paciente consiste en darle información y sugerencias para ayudarle a:

• Identificar el problema.
• Modificar el estilo de vida para reducir al mínimo la exposición a alérgenos e irritantes.
• Manejo adecuado de la piel frágil (limpieza, uso de emolientes,…).
• Valorar la posibilidad de cambiar el tipo de trabajo.
• Ser realistas con las expectativas sobre la posibilidad de controlar el eccema.

Limpieza manos en caso dermatitis

La limpieza debe ser precisa y delicada:

• Utilizar limpiadores con o sin antisépticos en fórmulas que no sean irritantes y con pocos componentes que no sean sensibilizantes.
• Usar limpiadores oleosos que limpien por afinidad y no por contraste, soluciones acuosas con pH fisiológico (5-6).
• Aclarar para evitar que queden residuos de jabón (especialmente los espacios interdigitales de las manos).
• Secar la piel con suavidad, con pequeños toques.

Tensioactivos

Aquellos con elevado poder limpiador/espumante son poco dermocompatibles y pueden dañar la barrera cutánea. Un ejemplo son los aniónicos.

Los más recomendables son los limpiadores que hacen poca espuma con tensioactivos no iónicos.

Por tanto, la limpieza debe ser por afinidad no espumosa, con sustancias que no irriten la piel, no hace falta generalmente el aclarado y son las formulaciones en leche o en aceite.

Riesgos asociados al uso de limpiadores

• Alteración de la barrera cutánea.
• Aumento de la sequedad cutánea.
• Aumento de la penetración de ingredientes irritantes/sensibilizantes: conservantes, fragancias, níquel y metales pesados

Pueden dar lugar a un agravamiento de las condiciones del eccema y riesgos de aparición de DIC/DAC.

Características del limpiador ideal

• Debe eliminar la suciedad sin alterar la barrera (limpieza suave).
• Contrarrestar la sequedad cutánea (acción emoliente relipidizante).
• No alterar el pH cutáneo.
• No contener sustancias sensibilizantes.

Efecto del limpiador sobre la Covid-19

Los limpiadores dermocompatibles son suficientes para romper los enlaces hidrofóbicos con lípidos que el virus establece y también los enlaces de hidrógeno con corneocitos y eliminarlos de nuestra piel.

Por tanto, un lavado de manos dermocompatible es suficiente para protegerse de la infección por el virus SARS-Cov2.

Recomendaciones de higiene y protección de manos

• Usar agua fría/tibia con jabones que limpien sin irritar, es decir, jabones oleosos poco espumantes para evitar los daños que los tensioactivos provocan en los lípidos epidérmicos.
• Evitar el uso de geles alcohólicos a base de cloro porque podrían desnaturalizar las proteínas que forman parte de la barrera.
• Aplicar productos emolientes después del lavado y antes de ponerse guantes.
• Educar en la selección de productos para evitar la dermatitis de contacto.
• Utilizar guantes de algodón debajo de los guantes de vinilo y cambiarlos a menudo.

Hidratación en caso de dermatitis o eczema

• Todas las guías destacan que la restauración de la barrera cutánea es esencial en el tratamiento de eccemas y, especialmente, en la dermatitis atópica.
• El uso regular y constante de emolientes se considera una parte fundamental de la terapia y, según estudios recientes, permitiría reducir los brotes y reducir, como consecuencia, el uso de esteroides tópicos.
• Estudios recientes señalan que con el uso precoz y regular de emolientes en recién nacidos, predispuestos a la atopia, se previene el desarrollo de dermatitis atópica y de la marcha atópica.
• Los emolientes de nueva generación, reparadores de barrera, tienen la capacidad de favorecer la diferenciación epidérmica y de corregir el defecto del cemento lipídico intercorneocitario.

El emoliente no debe contener alérgenos y/o haptenos para evitar el riesgo de sensibilización por contacto, especialmente en los grupos de edad más vulnerables (<2 años y ancianos).

Elementos fundamentales de los reparadores de barrera

1. Presencia de los 3 lípidos fundamentales (ceramidas, colesterol y ácidos grasos).
2. Proporción fisiológica entre los 3 lípidos.
3. Cantidad suficiente y correcta vehiculización que permita la penetración y la remodelación de la piel recuperando la barrera cutánea.

Terapia antiinflamatoria

Los esteroides tienen diversa potencia: baja, media, alta y muy alta. En las formas crónicas en general se recomiendan esteroides de media y baja potencia para evitar efectos colaterales. Es importante conocer la correcta dosificación de los esteroides tópicos.

La unidad de la yema del dedo (FTU, del inglés Fingertip Unit) es la medida estándar que se utiliza normalmente. Una FTU es suficiente para tratar una superficie equivalente a 2 palmas de las manos de un adulto.

Efectos adversos locales

En general, se observa con el uso repetido o prolongado de corticosteroides tópicos muy potentes:

• Atrofia cutánea
• Estrías
• Dermatitis alérgica de contacto
• Infección
• Debilitación de la barrera cutánea

Resumen para una correcta protección de manos

1. La alteración de la barrera cutánea es fundamental para el desarrollo del eccema (atópico, irritativo y/o alérgico de contacto).
2. El restablecimiento de la barrera cutánea es el elemento clave en la terapia del eccema, pero también en su prevención.
3. Las terapias locales y/o sistémicas de acción antiinflamatoria se tienen que asociar a estrategias para el restablecimiento de la barrera cutánea.
4. Es necesario educar al paciente sobre las medidas con el uso de EPIs.

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