Las Navidades han acabado y es hora de volver a la rutina y llevar a cabo todos nuestros propósitos implantando buenos hábitos, entre los que no puede faltar, comer de forma saludable y hacer más deporte.
Buenos hábitos para un nuevo año
La Navidad es sinónimo de cenas, comidas y compromisos que hacen que ingieras más calorías y toxinas. Los reencuentros, los villancicos y el alboroto han pasado, dejándote un montón de adornos que recoger, unos quilos de más y alguna que otra molestia digestiva.
Hemos preparado unos consejos para compensar estos excesos navideños y que así puedas comenzar el año más ligero y con motivación para conseguir buenos hábitos de ejercicio y alimentación.
La vuelta a la realidad puede resultar dura, por eso queremos ayudarte con estos 6 buenos hábitos:
Marca horarios
Las vacaciones siempre alteran las horas de sueño, tes acuestas tarde y compensas la falta de sueño con largas siestas.
Esto afecta a cuándo y qué comes. Al recuperar el horario habitual, mejorarás la calidad de sueño y te sentirás con más energía.
Realiza 5 comidas al día
Haz 5 comidas según la regla del plato de Dieta Coherente, para equilibrar tu apetito y el almacenamiento de grasa corporal.
Combinación estratégica de alimentos
Si sigues una dieta hormonalmente correcta como la Dieta Coherente, experimentarás los siguientes beneficios.
Lista de la compra y despensa saludable
Nunca vayas a la compra con el estómago vacío. Intenta ceñirte a tu lista de la compra y no metas en la cesta nada que no tuvieses intención de comprar.
Sigue los consejos de nuestro artículo sobre cómo tener una despensa saludable. Este es uno de los buenos hábitos más difícil de conseguir.
Caldo depurativo cada noche
Toma una taza de este caldo depurativo, en la cena durante 15 días. Ayuda a bajar de peso, a eliminar toxinas, mejora la retención de líquidos, ayudándote a verte mejor y sentirte más liger@.
Ejercicio aeróbico y tonificación muscular
Para mejorar tu salud, no llega solo la dieta, los ejercicios para perder peso activan tu metabolismo, garantizan que la pérdida de peso sea de grasa y evitan el efecto rebote.
Debes compaginar dos tipos de ejercicios: ejercicios aeróbicos y anaeróbicos. Los primeros te van a ayudar a coger fondo (aumentar tu resistencia quemando grasa) y los segundos para tonificar tu cuerpo, así los músculos estarán más definidos y la piel más firme.
Litro y medio de agua
Dentro de los buenos hábitos, este es un gran olvidado. Conviértelo en un hábito.
Proponte cuándo beberás cada vaso, al levantarte, en un descanso en el trabajo o antes de irte a la cama.
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